¿Qué es un Registrador de Temperatura?
Los registradores de temperatura son registradores de datos que miden la temperatura y registran y almacenan los datos en un momento dado.
Estos contienen un sensor de temperatura, un dispositivo de almacenamiento de datos y una batería, y se utilizan mucho cuando es necesario medir la temperatura de forma continua, como en el traslado de alimentos o en el control de la temperatura de los cultivos.
Usos de los Registradores de Temperatura
Las aplicaciones de los registradores de temperatura son amplias y variadas, ya que todas las industrias deben garantizar que las temperaturas sean las adecuadas. A continuación se enumeran algunas de las principales.
- Transporte de órganos trasplantados
- Experimentos e investigación que requieren control de temperatura
- Refrigeración de equipos electrónicos
- Cultivo de setas y levaduras
- Control de la temperatura en almacenes durante el transporte para evitar defectos
- Almacenamiento de productos farmacéuticos
- Mantener las condiciones de trabajo
- Gestionar libros en bibliotecas, galerías de arte y museos
- Fermentación y ahumado en la agroindustria
- Almacenar productos alimentarios
- Controlar la temperatura óptima para el desarrollo de productos agrícolas
- Medir el rendimiento de viviendas diseñadas
- Medir la temperatura de aguas termales
- Control de la temperatura de confort en tiendas, etc.
Principio de los Registradores de Temperatura
Un registradores de temperatura es un dispositivo que mide la temperatura a intervalos determinados y procesa y almacena digitalmente los resultados. Dependiendo del producto, el intervalo de medición puede seleccionarse entre segundos y horas.
En el pasado, las mediciones constantes, como las temperaturas del aire y de los líquidos, se registraban regularmente con un bolígrafo de color sobre un rollo de papel en el que se imprimían los ejes del gráfico. Hoy en día se siguen utilizando registradores de temperatura similares y se conocen como registradores de temperatura. Los registradores de temperatura tienen problemas, como que el aparato en sí es caro, requiere bolígrafos y papel de registro especiales y es difícil almacenar y analizar los datos.
Los registradores de temperatura se desarrollaron como un tipo compacto de registradores de temperatura. Los datos registrados convencionalmente con un bolígrafo se almacenan en un medio de almacenamiento denominado registrador. En comparación con los registradores de temperatura, los registradores de temperatura son más fáciles de usar en los siguientes aspectos:
- Más pequeños y ligeros
- portátiles
- Baratos
- No necesitan equipos especiales como bolígrafos, papel de registro, etc.
- Los datos pueden importarse directamente a un PC
- Puede utilizarse para mediciones remotas
Hoy en día, los registradores de temperatura pueden colocarse en contenedores de transporte o en almacenes para medir las desviaciones de temperatura y ayudar a mejorar los niveles de calidad.
Estructura de los Registradores de Temperatura
Un registrador de datos de temperatura consta básicamente de un sensor de temperatura, una memoria y una batería.
Dependiendo de la temperatura medida y de la precisión requerida, como sensores de temperatura se utilizan termistores, termopares (K, T, J) y resistencias de platino. También se utilizan sensores infrarrojos cuando se miden temperaturas superficiales.
Las baterías suelen ser intercambiables, pero en los tipos ultracompactos y en los destinados a autoclaves bajo presión, toda la batería está recubierta de metal y no puede sustituirse.
Tipos de Registradores de Temperatura
Existen varios tipos de registradores de temperatura en el mercado, en función de su uso y de la temperatura a la que se utilizan.
1. Uso General
Este tipo se utiliza para mediciones en interiores. Están diseñados con una pantalla digital para poder comprobar la temperatura mientras se está en el lugar.
Algunos son resistentes al agua o tienen un sensor de temperatura acoplado a la sonda para permitir la medición en espacios reducidos. Los datos pueden transmitirse de forma inalámbrica, por cable, NFC o Bluetooth.
2. Para medir la Temperatura en Superficies
Para medir temperaturas superficiales se utilizan sensores infrarrojos y sensores de temperatura con imanes.
3. Para uso en Autoclave
Los autoclaves también se conocen como esterilizadores de vapor a alta presión. Los autoclaves también pueden esterilizar esporas resistentes al calor. Sin embargo, como la temperatura en un autoclave no es constante, es necesario comprobar si el entorno es propicio para una esterilización fiable. Hay que comprobar la temperatura en varios lugares del autoclave. Para ello se utilizan registradores de temperatura, que están encapsulados para soportar altas presiones.
También se utilizan para el mapeo de la temperatura en entornos de procesamiento de alta presión, como las ollas de retorta y los alimentos enlatados.
4. Tipo Horno
Los hornos de reflujo se utilizan en el proceso de unión de placas de circuitos impresos y componentes electrónicos con soldadura, y requieren un aumento de temperatura de 150°C a 230°C. Para medir esta temperatura constante, se coloca un registradores de temperatura en una caja resistente al calor.
5. Para Temperaturas Ultrabajas
Los registradores de temperatura para temperaturas ultrabajas, como los que se utilizan en los procesos de liofilización y en los congeladores, pueden utilizarse para comprobar que las vacunas y las cepas se almacenan correctamente.
6. Ultracompactos
Los registradores de datos más pequeños que una pila de botón se utilizan en contenedores o cajas durante el transporte de mercancías.