¿Qué son los Sensores para Vehículos?
Los sensores para vehículos, también denominados sensores de detección de vehículos, desempeñan la función de detectar y contabilizar la cantidad de vehículos que han transitado o se encuentran estacionados en una ubicación específica.
La utilización de estos sensores conlleva una mejora significativa en las capacidades de gestión, ya que posibilitan el seguimiento de los vehículos estacionados en áreas como los estacionamientos, al tiempo que detectan cualquier anomalía, como la marcha atrás. Asimismo, contribuyen a optimizar la eficiencia de los desplazamientos de vehículos en entornos como fábricas y centros de distribución.
Cabe destacar que los sensores para vehículos están disponibles en distintas versiones, tales como mural, empotrada o de techo, en función de la aplicación específica.
Usos de los Sensores para Vehículos
Los sensores para vehículos se utilizan en grandes aparcamientos, aparcamientos de monedas, puertas de fábricas, centros de distribución, etc., ya que pueden detectar la presencia o ausencia de vehículos como coches y camiones. En los aparcamientos, en particular, los sensores para vehículos son cada vez más populares en los últimos años, ya que pueden controlar la disponibilidad de plazas de aparcamiento mediante la instalación de un sensor de vehículo en cada posición de aparcamiento individual.
Algunos sensores para vehículos también pueden utilizarse para proteger a los peatones avisando con un zumbido o una señal acústica a los transeúntes cuando pasa un vehículo.
Principios de los Sensores para Vehículos
Los sensores para vehículos difieren en lo que detectan en función del producto y existen varios tipos de principio. Los tipos más utilizados son los sensores de microondas, infrarrojos y ultrasonidos. Las ondas reflejadas de microondas, rayos infrarrojos, ondas ultrasónicas, etc. que inciden en el objeto se miden para determinar la velocidad de desplazamiento, la distancia y la presencia/ausencia del vehículo objetivo. Muchos de estos productos que utilizan ondas reflejadas pueden funcionar mal en cierta medida debido a las condiciones meteorológicas, especialmente cuando se utilizan al aire libre. El alcance de detección también puede variar en función del tamaño y el material del vehículo detectado.
Otro principio es el sensor de bobina de bucle. La presencia o ausencia de un vehículo se determina detectando la inductancia que cambia cuando un objeto metálico pasa por encima de una bobina de cable en bucle. Este tipo está empotrado y requiere trabajos de instalación.
Un principio similar al de los sensores de bobina en bucle es el de los sensores magnéticos. Detectan y determinan el cambio de magnetismo provocado por el paso de un vehículo metálico.