¿Qué es un Martillo de Cobre?
Como su nombre lo indica, los martillos de cobre utilizan cobre, un metal muy blando, como material. Se utilizan para golpear piezas metálicas en las que no se desea dañar el material de base.
El acero es el material más duro de los utilizados habitualmente para la cabeza, seguido del hierro dulce, siendo el aluminio, el latón y el cobre los más blandos en ese orden. Los materiales más blandos son el plomo y el plástico.
La gente tiende a elegir los martillos de plástico como material más blando para evitar lesiones por golpe, pero no son lo bastante fuertes para golpear clavos y otros objetos.
Además, la cabeza es de material de cobre, que tiene la propiedad de que no produce chispas aunque se clave con fuerza. También pueden utilizarse con seguridad en obras donde haya gases inflamables cerca. Los martillos antideflagrantes son martillos a prueba de explosiones diseñados para un uso seguro en lugares de trabajo donde se manipulan líquidos inflamables.
Usos de los Martillos de Cobre
Suelen utilizarse para dar forma al aspecto exterior, aprovechando la suavidad característica del cobre. También es adecuado cuando se trata de materiales débiles y delicados a los golpes. Es el caso de la reparación de perfiles superficiales como la “piedra” y el “hormigón”.
También son útiles para la “fabricación de moldes de acabado”, el “moldeado” y la “reparación y corrección”, ya que se pueden presionar mientras se golpea. Por ejemplo, para trabajar en piezas de carrocería y alrededor de ejes de transmisión. Los martillos de cobre se utilizan con frecuencia para evitar daños en piezas roscadas, como las tuercas de husillo, cuya construcción es especialmente delicada.
Debido a que no producen chispas al ser golpeados, son eficaces en plantas químicas y centrales térmicas donde pueden producirse fugas de gases inflamables. Ejemplos de ello son las propias tuberías de gas y los lugares con tuberías intrincadas. El polvo también es una fuente potencial de ignición, por lo que son adecuados para trabajar en zonas donde puedan quedar atrapadas partículas finas.
Los martillos de cobre están formados por materiales no magnéticos, por lo que es frecuente utilizar herramientas de cobre en lugar de acero o acero inoxidable en equipos donde se generan fuertes campos magnéticos.
Al golpear placas de cobre, los martillos de cobre tienen la ventaja de que las placas de cobre son menos propensas al deterioro. Otros materiales pueden provocar óxido y otras formas de deterioro.
Cómo Elegir un Martillo de Cobre
- Material de la Cabeza
Un material habitual son las cabezas de martillo de cobre fundido, que son económicas.
En cambio, para el trabajo de campo y el uso frecuente, es apropiado un producto de cobre laminado en latón con mayor durabilidad. Un martillo de latón laminado es aproximadamente tres veces más resistente que un martillo de cobre fundido. Como resultado, son menos propensos a la deformación y pueden utilizarse durante más tiempo.
Además, existen martillos en los que la parte interior de la cabeza es de hierro, mientras que los martillos fabricados íntegramente con cobre se denominan martillos totalmente de cobre. Los martillos parcialmente hechos de hierro tienen un mejor rendimiento de golpeo.
Si el cobre por sí solo es demasiado débil, también hay martillos combinados en el mercado, en los que un lado de la cabeza está hecho de un material diferente. Es posible elegir un material más duro que el cobre o incluso más débil. - Sustitución de la Cabeza
Debido a su material relativamente blando, los martillos de cobre son herramientas propensas a sufrir deformaciones, como abolladuras y desconchones. Por lo tanto, si la herramienta se usa con frecuencia o si se utiliza a menudo para martillar materiales de alta resistencia, se puede utilizar un tipo de martillo con cabeza reemplazable para mantener bajos los costes de mantenimiento.