¿Qué es una Junta Antipolvo?
Las juntas antipolvo impiden la entrada de polvo del exterior y protegen la empaquetadura y los rodamientos. Como su nombre indica, las juntas antipolvo evitan la entrada de polvo del interior. También se conocen como “empaquetaduras”. Dependiendo de la aplicación, el cilindro puede protegerse cambiando la norma o la combinación de la empaquetadura, y puede utilizarse desde bajas temperaturas (-30°C) hasta altas temperaturas (80°C) sin problemas. Las juntas antipolvo se utilizan para proteger el interior en la parte más exterior del equipo y deben sustituirse periódicamente.
Usos de las Juntas Antipolvo
Las juntas antipolvo se utilizan para proteger el motor. Las juntas antipolvo se utilizan en componentes del motor como cilindros (neumáticos o hidráulicos) y actuadores eléctricos. Los actuadores se han desarrollado desde la revolución industrial, ya que son productos fabricados específicamente con componentes funcionales integrados en el motor, que son la unidad de accionamiento y el actuador que actúa sobre la energía de accionamiento. Las juntas antipolvo se utilizan en una amplia gama de aplicaciones industriales, desde aplicaciones de laboratorio hasta motocicletas, coches y barcos. Muchos llevan una incrustación, por lo que hay que asegurarse de que se montan en la dirección correcta.
Características de las Juntas Antipolvo
Las juntas antipolvo se moldean a partir de caucho de nitrilo, caucho de uretano o, en algunos casos, caucho fluorado. El caucho de nitrilo es barato y versátil, pero tiene la desventaja de ser resistente a la intemperie, especialmente a la luz solar directa, y se deteriora rápidamente cuando se utiliza bajo la luz solar. El caucho de uretano se utiliza a menudo porque tiene la mejor resistencia a la abrasión de todos los cauchos sintéticos. También tiene una gran resistencia mecánica, una gran elasticidad y una gran absorción de energía, por lo que suele utilizarse para productos industriales que implican un movimiento intenso. Los fluoroelastómeros se utilizan en cilindros hidráulicos y aplicaciones exteriores, ya que son resistentes a los productos químicos y al calor.
Las juntas antipolvo se fabrican por moldeo a presión. Las materias primas de caucho y los endurecedores o agentes compuestos se amasan juntos para producir un material de caucho llamado compuesto. El material de caucho se vierte en un molde y se somete a calor y presión para llevar a cabo una reacción de reticulación con azufre, vulcanización y moldeo al mismo tiempo. Las juntas antipolvo moldeadas se sacan del molde y se eliminan las rebabas. El retén se vuelve a calentar para la vulcanización secundaria.