¿Qué es un Hemostato?
Hemostato es el término general para referirse a un torniquete o fármaco utilizado para detener la salida de sangre tras una hemorragia externa o interna. La hemorragia externa se refiere generalmente a la salida de sangre de los vasos sanguíneos.
La hemorragia interna se refiere al derrame de sangre de células u órganos del cuerpo. Las hemorragias externas pueden detenerse con hemostatos envolviendo el lugar de la hemorragia con un torniquete a una distancia de 5-8 cm del lugar de la hemorragia, cerca del corazón, o envolviendo el lugar de la hemorragia con un vendaje. Otros métodos consisten en presionar directamente la zona sangrante con un paño.
En caso de hemorragia interna, se pueden tomar medicamentos por vía interna o utilizar goteros intravenosos para detener la hemorragia. Dependiendo del lugar de la hemorragia, puede ser difícil detenerla en el acto, por lo que hay que tomar las decisiones adecuadas según la situación.
Usos de los Hemostatos
Los hemostatos se utilizan para detener las hemorragias de diferentes maneras, dependiendo del tipo de hemorragia. Existen dos tipos principales de hemorragia, que pueden subdividirse a su vez.
La hemorragia externa incluye la hemorragia arterial, venosa y capilar.
- Hemorragia Arterial
La sangre es de color rojo vivo y sangra vigorosamente al latir. La sangre se drena muy rápidamente y debe tratarse con rapidez. Por lo general, este tipo de hemorragia puede detenerse mediante torniquete de presión directa o hemostasia con torniquete. En la hemostasia por torniquete de presión directa, se aplica presión directa en el lugar de la hemorragia con un paño o venda, utilizando guantes de goma para evitar el contacto directo con la sangre. - Hemorragia Venosa
La sangre es de color rojo oscuro y sale continuamente. Por lo general, la hemostasia se consigue del mismo modo que en una hemorragia arterial. Si la hemorragia procede de una vena pequeña, la hemostasia puede conseguirse únicamente mediante hemostasia por presión directa. - Hemorragia Capilar
Se trata de una hemorragia en la que la sangre rezuma de la zona sangrante. Suele detenerse espontáneamente, pero puede mantenerse higiénica protegiéndola con un vendaje. - Hemorragia Interna
Hay muchos tipos diferentes, pero un ejemplo es la hemorragia gastrointestinal. Se trata de una hemorragia del esófago, el estómago o los intestinos. El método más común de hemostasia es la hemostasia endoscópica.
Principio de los Hemostatos
Se utilizan hemostatos para prevenir la pérdida de sangre, pero la hemostasia por presión directa es el método más común para detener la hemorragia, utilizando un paño para aplicar presión. Otros métodos eficaces de hemostasia son los torniquetes. Los torniquetes contienen quitosano o sustancias similares como ingrediente principal, y la unión del quitosano a los glóbulos rojos da lugar a la formación de coágulos de sangre para detener la hemorragia sin que se formen coágulos.
La hemostasia por torniquete se utiliza principalmente para detener hemorragias en cantidades que no pueden detenerse mediante hemostasia por presión directa. Generalmente, la hemostasia se consigue utilizando una banda para detener el flujo sanguíneo.
Este método es difícil de realizar con una sola mano y puede que no sea posible que una sola persona detenga la hemorragia. En estos casos, se puede utilizar un torniquete especial llamado torniquete para detener la hemorragia. Los torniquetes llevan acoplada una barra denominada varilla, que se gira para apretar la banda y detener el flujo sanguíneo. Además del tipo de varilla, también existe un tipo de dial.
Otros métodos de tratamiento hemostático con hemostatos incluyen el uso de un endoscopio como procedimiento quirúrgico. Algunos ejemplos son la inyección local, la hemostasia mecánica, la coagulación térmica y la pulverización de fármacos.
- Método de Inyección Local
Los vasos sanguíneos se solidifican mediante la inyección de un medicamento. Los medicamentos inyectados incluyen etanol puro y solución salina. - Hemostasia Mecánica
La hemostasia se consigue aplicando una pinza o un anillo de goma en el lugar de la hemorragia. - Coagulación Térmica
La hemorragia se detiene cauterizando el lugar de la hemorragia o utilizando un haz de plasma. - Pulverización Medicamentosa
La hemostasia se consigue rociando o pulverizando la zona sangrante con una solución de trombina o polvo de alginato sódico.