¿Qué es la Polea de Motor?
Una polea es un elemento de uso frecuente en maquinaria y equipos, vehículos y otras fuentes de energía, pero en el caso de las poleas de motor en particular, se refiere a una estructura de accionamiento de rodillos integrada con un motor de accionamiento y un engranaje reductor para ajustar la velocidad del motor dentro de la polea.
El rodillo cubierto por el motor no sólo gira y sirve como unidad motriz de la cinta transportadora para el transporte, sino que también es una fuente de energía segura, silenciosa y que ocupa poco espacio, ya que el accionamiento está integrado en la estructura cerrada.
Usos de las Poleas de Motor
Las aplicaciones típicas de las poleas de motor son como fuente de energía para cintas giratorias instaladas en el interior de cintas transportadoras. Se instalan en varios lugares y, dependiendo de la cinta transportadora, existen varios tipos de rodillos, incluidos los de caucho y los de anillo magnético. Al tratarse de motores, no requieren lubricación ni otro tipo de mantenimiento.
Las poleas de motor, en el sentido amplio del término, también incluyen aplicaciones de cambio de transmisión automática, como las CVT de los automóviles. En este caso, se utiliza un mecanismo por el que la posición de la correa en la polea cambia en función del par de aceleración y la velocidad para poleas con diferentes diámetros de rodadura.
Principio de las Poleas de Motor
La fuente de energía de una polea motriz es un motor, cuya velocidad de rotación suele ser constante, y se utiliza un inversor para cambiar la velocidad de la cinta transportadora.
Los transportadores de rodillos son máquinas que utilizan la rotación de rodillos en lugar de una cinta para transportar objetos, pero el diámetro exterior de los rodillos utilizados para este fin suele ser relativamente pequeño. Por otro lado, para los transportadores de banda se suelen utilizar motores con un gran diámetro exterior y par de giro.
También son frecuentes las poleas que utilizan correas trapezoidales o cadenas de rodillos, pero en este caso la velocidad de giro puede modificarse cambiando la relación entre el diámetro exterior de la polea trapezoidal y la posición de la correa. Por supuesto, los inversores también pueden utilizarse en combinación.
La ventaja de las poleas con motor integrado es que el motor encaja con precisión en el núcleo de la polea y acciona los rodillos directamente a través de los engranajes internos sin generar pérdidas, lo que se traduce en una eficacia de transmisión del par de giro muy elevada. Para mejorar el rendimiento, el aceite queda sellado en el interior de la polea del motor alrededor del 30% del tiempo, y algunos motores también sirven para lubricar y refrigerar los rodamientos.