Qué es una Impresora de Transferencia Térmica?
Una impresora de transferencia térmica es un dispositivo de impresión por contacto que utiliza la tecnología de transferencia térmica para crear impresiones. Funciona presionando caracteres metálicos, también llamados tipos, sobre una cinta de impresión.
Características de las Impresoras de Transferencia Térmica
No requieren secado ya que emplean cintas metálicas en lugar de tinta. Ofrecen impresiones de alta calidad y nitidez. Minimizan la necesidad de limpieza en manos y máquinas. La impresión se aplica directamente al material impreso, lo que puede resultar en una superficie irregular y difícil de manipular.
A pesar de sus ventajas, en comparación con las impresoras de inyección de tinta sin contacto, las impresoras de transferencia térmica presentan algunas desventajas, como:
Costos operativos más elevados debido a las cintas y los tipos de impresora. Requieren tiempo para calentarse o enfriarse al arrancar o después de una parada por problemas. Existe el riesgo de que la cinta de impresión se enrolle. La impresión puede volverse inestable debido al desgaste de los tipos o a variaciones en la presión de contacto.
Usos de las Impresoras de Transferencia Térmica
Estas impresoras se utilizan principalmente para imprimir fechas de caducidad, números de lote y símbolos específicos de fábrica en películas de envasado de productos.
En el envasado horizontal de almohadilla, donde los productos se desplazan por una cinta transportadora, se emplean impresoras de transferencia térmica continuas, que giran la sección de tipos para imprimir de manera constante.
En el envasado vertical de almohadas, donde se empacan líquidos o polvos mientras caen, se usan impresoras de transferencia térmica intermitentes, que imprimen cuando se sella o corta la película.
Debido a su uso de cintas de aluminio, son apropiadas para imprimir en envases de alimentos y productos médicos, ya que reducen la posibilidad de ensuciar la máquina y las manos.
Principio de las Impresoras de Transferencia Térmica
Estas impresoras emplean cintas de lámina en lugar de tinta. Aplican calor a un tipo de metal, que se presiona a unos 150 °C sobre la cinta de impresión, lo que hace que la lámina se despegue de la zona impresa y se transfiera al objeto a imprimir.
La cinta de lámina, transferida por calor, tiene una película, una capa de liberación, una capa de color y una capa adhesiva en el lado del tipo. A diferencia de la tinta, no requiere secado tras la transferencia térmica.
Además, es resistente al tratamiento de ebullición posterior a la impresión y puede imprimir tanto en papel como en polietileno y papel laminado.
Para garantizar una impresión estable, son fundamentales la presión y la temperatura con las que se presiona el tipo.
Una desventaja de las impresoras de transferencia térmica es que lleva tiempo cambiar la cinta y alcanzar la temperatura adecuada. Por esta razón, las impresoras térmicas, que operan sin contacto y permiten la transferencia térmica, se utilizan ampliamente desde aproximadamente el año 2000.
Estas impresoras son atractivas porque no emplean tipos y pueden imprimir códigos de barras además de texto.